domingo, mayo 15, 2005

La intérprete (Sydney Pollack) -2004-


Silvia Broome (Nicole Kidman) es una particular intérprete trabajando en la sede neoyorkina de la ONU. Su pasión por la música folklórica de un país africano (en la vida real imaginario), Mubata, la inmiscuirá involuntariamente en un peligro inminente. El lugar, el momento, la persona y el susurro inadecuado son muy peligrosos para la salud de quien lo vive, ve o escucha. Silvia oye y ve algo que no debe y se ve obligada a denunciarlo, con lo cual entrará de lleno en una trama de conspiraciones. Entra en juego Tobin Keller, un agente federal, (Sean Penn) que sin obligación de hacerlo, acabará protegiéndola. Familia, mentiras, tensión, asesinatos e intereses políticos en un guión enrevesado en el pasado de la protagonista y mezclado con la triste “pasión” del terrorismo, confabulaciones y conspiraciones. Todo este aderezo da como resultado un entretenido e intrigante film que como mínimo no deja flemático al espectador, porque eso sí, el espectador se mantiene tenso y en suspense hasta prácticamente el final. Aquellos que vayan atando cabos, lograrán obtener anticipadamente el final.

Nicole Kidman, metida en el ya suyo, rol de mujer fría y de caparazón macizo, si no borda al menos cose muy bien la escenificación personal del miedo escénico y de la ansiedad personificada en todo aquel que estuviera en su lugar. Por supuesto sin perder un gramo de elegancia y clase, para el deleite del espectador. Sean Penn, un hombre hundido, aunque igual de consistente, acaba de recibir un duro golpe, aunque mejor dos. El último de ellos topar con una mujer sencillamente atractiva, misteriosa, inteligente y peligrosa, casi nada. Como no pudiera ser de otra forma hay roce, y donde hay roce hay como mínimo amor y amistad.

Si algo ha sabido llevar bien el laureado director de suspense Sydney Pollack (La Tapadera, Eyes Wide Shut, El Talento de Mr Ripley, Cold Mountain…) es trasladar bien a la pantalla la emoción de la tensión contenida, la angustia y la intriga, sin por ello caer en los típicos banalismos ni predecibles escenas, aunque apoyado en algunas escenas intimistas de la protagonista. Es también de agradecer que uno de los mayores directores de intriga y suspense haya sabido mezclar un romance que se podría calificar de lógico y creíble en las situaciones en que se desarrollan el film.

Bien, un film de intriga y con un argumento sustancioso que no deja decepcionado al salir de la sala, sin que esto suponga que sea un film excelente. Sencillo pero bien llevado; un proyecto basado en su mayoría en un guión firme y sin fisuras, (exceptuando las lógicas invenciones geográficas) con unos personajes bien representados. Disfrutadla, la película claro.

Como detalle, destacar que en la película observamos las primeras escenas grabadas del centro de operaciones de la ONU.

Hugo Nuño